Un 22 de febrero de 1939 nos dejó DON ANTONIO. Mi recuerdo para él que supo como nadie ser fiel a sus ideales y se adentró en el espíritu soriano con gran parte de una obra insuperable.
Afloran las lágrimas pensando en sus días felices y en aquellos que le llevaron a morir "cerca pero fuera" de su España.
Se hace un nudo en la garganta... ¡¡¡ Gracias, Don Antonio por cuanto significa para mí!!!.
No hay comentarios:
Publicar un comentario