martes, 24 de marzo de 2015

Cuestión de nombres.

Hace unos minutos se entrevistaba a Felipe González en la Ser a propósito de su trabajo en Venezuela - que aplaudo ya que contribuye a solucionar el conflicto - y habla además de las elecciones andaluzas. En un momento determinado comentando de ciutadans dice textualmente: "Albert o Alberto". Me parecen muy fuera de lugar esas palabras. El ciudadano tiene perfecto derecho, y nadie lo debe dudar a llamarse Albert; así sin traducción. Lego hablamos de suspicacias, recelos... y con cosas como estas alimentamos el fuego...
Mis nietos tienen todos su nombre en Valenciano y NO HAY TRADUCCIÓN, tiene ese nombre y basta. Yo les digo, a veces, cuando se lo castellanizan, que no se den por aludidos y pasen...
Que dice ante esto la muy normal ala más nacionalista del PSOE ?
Acabo. He leído esto en internet que copio y pego:
"Yo creo que los nombres no deben traducirse puesto que son parte de nuestras raíces, nuestra escénica y de nuestra cultura.Cada quien nace en un lugar y ámbito sociocultural determinado y los nombres conllevan el peso de la historia nacional y familiar de una persona es el rasgo más definitorio de la identidad y cambiarlo sería anular la identidad de la persona en cuestión."

Meditemos...


No hay comentarios:

Publicar un comentario